William Krows

William Krows el Lénico, fue uno de los descubridores de las Islas de Leit o archipiélago de Kane. Nacido en Ibrim, capital de Lenya, estudió peletería profesional ― para continuar con el negocio familiar ― en la Escuela de Artes de Ibrim y, paralelamente, se instruyó en arte dramático y teatro de manera clandestina.

Su llegada al Reino de Aldor y sus motivos son muy poco precisos, pero los primeros datos sobre él fueron registrados en las aduanas del puerto de Ymber en tiempos de Mirielth I.

Una insaciable ambición fue lo que le llevó a entrar en la milicia aldoriana a sus 24 años de edad, y a formar parte de una compañía de mercenarios, el Puño de Hierro, tan solo un año después, bajo la supervisión del sirdario Goirun Lefict.

Tras dos incendios en la sede del Puño de Hierro y el ajusticiamiento de Elöndir, líder en aquel momento, por alta traición, William cogió las riendas del gremio y lo llevó hasta la cúspide, vinculándolo al ejército del reino, motivo por el cual, actualmente, da nombre a la elite del ejército de Nueva Angor.

Evolución en tierra firme

Tras dos años ejerciendo como líder del Puño de Hierro, William fue nombrado jefe de la milicia aldoriana y comandante de la expedición en busca de la Corona del Conquistador, en el mar de Cirren. Las consecuencias fueron nefastas. Tras la destrucción del Consejo de Sabios de Saboo por cortesía del nigromante Daegan, las huestes de Udukán, junto con enemigos de todas las partes de Mundo, se unieron con el fin de reducir el Reino de Aldor a cenizas; hecho también conocido como la Gran Guerra.

El capitán Krows tenía que ser el estandarte de la milicia aldoriana y del Puño de Hierro en la batalla de Bassara, pero por razones de peso mayor tuvo que abandonar las filas momentos antes de la ofensiva, para iniciar una campaña en busca de Alexander nu Leit.

Evolución en alta mar

Siendo conocido como capitán, pero desconociendo la procedencia de dicho título, William Krows fue el encargado de comandar la nave Destino en el viaje a Cirren, y el Espada Roja en la búsqueda de Alexander nu Leit. Fue ascendido a Almirante e incluido en el Consejo Aldoriano durante la Gran Guerra, pese a que sus expertas habilidades eran de dudosa reputación.

Finalmente, y tras el rescate de Alexander nu Leit, los acontecimientos les llevaron a descubrir las Islas de Leit. William se encargó de transportar a los refugiados aldorianos a las islas junto con Lady Nuriel Delacroix, en aquel momento Gran Maestre de los Heraldos del Amanecer, con la que desposó a su vuelta a Angor.

Últimos rumores

El último viaje del Capitán Krows y sus acompañantes para encontrar al clérigo Alexander nu Leit, se sitúa en la fina línea que separa la leyenda de la pura invención. Se habla de enormes monstruos primigenios a los que tuvieron que enfrentarse, de ciudades sumergidas, increibles artilugios meroneses e incluso de un elixir de la inmortalidad. Algunos estudiosos, basándose en fuentes oficiales, afirman que el cuerpo del capitán William Krows, junto con el de su esposa Lady Nuriel Delacroix, fue incinerado en su buque estandarte, el Corazón Esmeralda, al fallecer ambos por causas naturales, aunque curiosamente, fallecieron al mismo tiempo.

También se han encontrado documentos que relacionan a William Krows con Golena, una de las ciudades más importantes de Merón, aunque se desconoce la relación del capitán Krows con la urbe meronesa.

Sus descendientes directos, parece ser que cambiaron sus apellidos y se instalaron en Lenya como comerciantes, pero no hay certeza ni más informacón al respecto.

Frase célebre: “A veces hay que girar el timón hacia el lado opuesto al que indica tu sentido común para llegar donde realmente indica tu corazón.” Capitán William Krows.