Diferencia entre revisiones de «Sarra»
Línea 54: | Línea 54: | ||
Tradicionalmente, la Suma Sacerdotisa de Sarra, ha sido la comadrona de la Casa Real Sachais. | Tradicionalmente, la Suma Sacerdotisa de Sarra, ha sido la comadrona de la Casa Real Sachais. | ||
==Otros datos== | ==Otros datos== |
Revisión del 10:36 21 jul 2016
http://www.aldor.es/images/ico_sarra.jpg
Sarra es la diosa de la tierra, la gran Madre protectora de la vida, las plantas y los animales. Protege toda vida, pero no se preocupa de las leyes de ninguna clase. Es una deidad bondadosa, pero severa con aquellos que no respetan su obra.
Datos generales
- Categoría: Dios mayor
- Símbolos: Un almendro en flor. Una raíz de roble (Palindro y Sirdarios). Flor de plata (Yag).
- Otros nombres: Madre Tierra, Dadora de Aliento, Madre
- Alineamiento: neutral bueno
- Dominios: tierra, animal, bien, curación, saber, vegetal, protección.
Mitos y leyendas
De todas las deidades es ésta sobre la que más historias se han escrito hablando de su presencia en el plano mortal.
Sarra es la hacedora de la tierra y madre de la vida. Sin su guardiana, la vida no existiría. Como una explosión de vigor, Sarra no se somete a leyes ni edictos y poco le importan los dictados de Marish. Tal y como se describe en “Del Origen de Mundo y los Dioses”, Sarra dio nombre al mundo según las enseñanzas de Marish, y despertó la vida creando a Vryllia.
La llegada de Sarra llenó de deseo a los otros hijos de Marish, y anhelaron estar cerca de ella. Pronto quedó claro que Sarra nunca estaría demasiado cerca de Leit, pues éste era lento y pausado para tomar decisiones mientras que ella estaba inquieta por conocer el universo.
Por su parte, Trako y Eldor sintieron una gran atracción hacia la diosa y ambos pugnaron por su atención. Trako, intentando lograr ventaja sobre su hermano, vertió palabras envenenadas en los oídos de Sarra, mas ésta pudo leer en su corazón y rechazó al oscuro, uniéndose finalmente a Eldor como consorte. Se dice que, aunque colaboran a menudo y existe entre ellos una relación inquebrantable, Sarra y Eldor a veces discuten, ya que ella ve en su esposo a una figura demasiado autoritaria que se preocupa muy poco por las cosas pequeñas.
Con el tiempo Leit y Sarra han llegado a entenderse bien, ya que ambos suelen estar en medio de las disputas entre Eldor y Trako. Sin embargo, Sarra no puede evitar ver a Leit como a un patriarca testarudo, tan ocupado en saber como funciona la creación que no es capaz de apreciar su belleza.
Algunas historias de finales de la Tercera Edad cuentan que fue la propia diosa Sarra quien redimió la ciudad maldita de Uduk.
Historia reciente
El culto a Sarra se mantiene vivo tras la Gran Guerra, aunque sus fieles se han visto mermados tras la devastación sufrida a manos de las huestes de Trako.
Muchos de sus seguidores trabajan para la ciudad atendiendo a los heridos en la Casa de Curación, tras la pérdida de los bosques sagrados y los principales círculos druídicos, solo unos pocos mantienen su lucha fuera de los muros de Nueva Angor. Uno de estos círculos continúa existiendo en un asentamiento cercano a la ciudad, en el paraje conocido como el encinar, aunque el culto principal de poblado está vinculado a Vryllia.
Clero y rituales
Sarra es ante todo una defensora de la vida, cada vez que algo muere, la diosa siente su pérdida. Es por ello que de todas las deidades Sarra es la que más sufre cada vez que los dioses o los mortales batallan. Pero a la vez, la Dadora de Aliento, sabe que el ciclo de la vida incluye la muerte; por ello acepta que toda creación suya en Mundo ha de perecer algún día, desde que Trako dio nombre a Ruballa este ha sido el compás de los tiempos.
Entre los servidores de Sarra no hay grandes guerreros, sus siervos son sanadores y vigilantes y tienen las manos más a menudo sobre las herramientas que sobre las armas.
La principal función de los sacerdotes de Sarra es sanar a los enfermos y mantener el aliento de los heridos. Aunque luchará en caso de que la vida corra peligro, un clérigo de Sarra intentará no matar nunca a un oponente. Otra función de los sacerdotes de Sarra es la de exterminar a los no muertos, cada uno de ellos es una mancha en la límpida superficie de Mundo.
Por su parte, druidas y exploradores cumplen una función bien distinta, mientras que los sacerdotes se dedican a sanar, los druidas protegen el equilibrio y los bastiones naturales que recuerdan cómo fue el mundo antes de que la civilización dejara su huella.
Los exploradores son los vigilantes, cada uno de ellos tiene la misión de vigilar e informar para prevenir los desastres que amenacen la creación de Sarra; se sabe que además ayudan a los sacerdotes en sus purgas de no muertos.
El rito de paso que los seguidores de Sarra está relacionado con el juramento de su dogma. Todo fiel de su doctrina lo respeta, aunque la interpretación de cada uno puede variar en su modo de aplicación, habiendo surgido en ocasiones grupos de druidas radicalizados que alteraban la convivencia entre los pueblos. El dogma de Sarra se basa en cuatro directrices:
- La vida engendra vida, no combatas la muerte con muerte, sino con más vida.
- Todo lo que crece ha de perecer, la muerte es parte del ciclo, acéptala aunque solo a su debido tiempo.
- Las razas pensantes tienen su lugar en las ciudades y villas, protege el territorio de las bestias y las plantas cuando ellas no puedan defenderlo.
- Cada vida es preciosa más allá de toda medida, trátala como tal.
Además de esto, cada seguidor de Sarra debe plantar un árbol, al que cuidará y vigilará hasta el fin de sus días. Se sabe que algunos siervos fieles han llegado a hallar cobijo en este árbol después de que su cuerpo sucumbiera a la mano de Ruballa.
La máxima representación de la Iglesia de Sarra, pese a no ser ésta una institución férrea en su jerarquía, es la Suma Sacerdotisa. Se trata frecuentemente de mujeres bendecidas con el don de la fertilidad, y hay quien dice que bajo su mano y su cuidado incluso un árbol seco puede renacer.
Tradicionalmente, la Suma Sacerdotisa de Sarra, ha sido la comadrona de la Casa Real Sachais.
Otros datos
- Morada: Cima del Bosqa.
- Colores: Verde y tonos pardos.
- Áreas de influencia: Allí donde haya vida, desde la selva más frondosa hasta los pequeños arbustos del desierto.
- Adoradores: Druidas, sanadores, exploradores, jardineros, matronas, madres.
- Arma favorecida: Rejuvenecedora (vara).
- Clase preferida: Druida.
- Vestimentas predilectas: Túnicas que varían según la estación del año. Verde claro en primavera, verde oscuro en verano, marrón en otoño y blanco en invierno.
Nombres en otras lenguas
- Eyneo y lénico: Sarhe (Aliento Vital)
- Sirdario, heredado de Palindro: Yimea (Madre)
- Yag: Lahar'el (Eterna Primavera)
- Contio y antiguo veoliano: Esthia (La que hace crecer)
- Halaii: Kheerdinira (La Ausente)
- Oóntur: Shelekuma (Primera Madre)