Jaqoh

Títulos:	Señora Etérea, Mistral, Viento Jovial
Símbolo:	Mano vacía.
Influencia en:	Viento, tormentas, mensajeros y los viajes.
Colores:	Blanco, azul y gris.
Palacio:	Carece.

Jaqoh, hija de Leit, domina los vientos y actúa como mensajera de los dioses. Aunque nació originalmente para traer noticias a su calmado padre, pronto los demás dioses solicitaron su ayuda permitiendo que la diosa del viento recorriera libremente todos los rincones del mundo sin oposición; el aire de Eldor, la tierra de Sarra y el fuego de Trako. Al contrario que el dios de las aguas, Jaqoh es inquieta y curiosa, mucho más intervencionista ya que alienta a los viajeros y protege a los mensajeros. Su soplo es cálida brisa en el corazón de los que buscan la paz, pero furiosa tormenta cuando desata su ira.

Señora Etérea

La diosa del viento no posee una forma definida como los demás dioses, aunque a menudo es representada como una doncella alada, la verdad es que Jaqoh no puede verse, solo sentirse. Siente una voraz curiosidad por los mortales y los acompaña a menudo en sus viajes, pero enseguida se aburre porque los considera lentos y torpes. Mantener la atención de Jaqoh es complicado y, probablemente es mejor que sea así, pues excesivo interés de la diosa puede provocar huracanes o tornados con sus respectivos desastres. Jaqoh nació libre de conceptos como el bien o el mal en su naturaleza, simplemente cumple su papel como mensajera suceda lo que suceda, aunque en ocasiones es manipulada por Trako para que avive sus fuegos que arrasan el mundo.

Mistral

Jaqoh protege a aquellos que deben llevar un mensaje, pues dado que nació para cumplir con ese papel hacia con su padre, considera que cualquier mensajero es sagrado. Muchos tiranos han visto como terribles calamidades han caído sobre sus reinos cuando decidieron asesinar a mensajeros de otras tierras, incluso entre los gobernantes más perversos hay genuino cuidado para no enfurecer a la diosa del viento. Es común entre los mensajeros rezar a Jaqoh y entonar un Por la gracia de Mistral antes de entregar un mensaje, solo para asegurarse de que, si son portadores de malas noticias, las iras de los que las reciben no caigan sobre ellos.

Viento Jovial

A pesar de ser una de las diosas menores más antiguas, Jaqoh se la considera una diosa eternamente joven y, hasta cierto punto, inconformista. Alienta los ánimos de los mortales y ensalza emociones intensas, se opone a los opresores y las leyes que encadenan. Muchos revolucionarios ven en ella una inspiración, un ejemplo de la libertad en el estado más puro del término, y Jaqoh alienta indistintamente las razones de un bando u otro siempre que el objetivo final sea la libertad. Es también una diosa inocente e irreflexiva, vive del momento, y muchos supuestos libertadores acaban convirtiéndose en tiranos traicionando los originales objetivos de la diosa.

Historia

Jaqoh compartió buena parte de su juventud con su padre, quien la instruyó sobre la importancia de no intervenir en los asuntos de los mortales. Lo cierto es que en esos primeros tiempos, la diosa del viento apenas participó de los acontecimientos de la Gran Isla, prefiriendo pasear libremente por todo el mundo trayendo noticias a su padre y mensajes entre los dioses. Pero con el paso del tiempo, la curiosidad innata de Jaqoh empezó a cambiar su perspectiva de su relación con los mortales y empezó a actuar con mayor injerencia en tales asuntos.

A lo largo de la historia de los mortales, la diosa del viento ha tenido poca relevancia más allá de su función como mensajera divina o sus ocasionales tormentas. Ha inspirado muchas revueltas sin quererlo, pero quizá la más importante en tiempos recientes fue la de los veolianos que se alzaron en contra de sus conquistadores leakhán. Una misteriosa sacerdotisa de Jaqoh conocida como la Voz del viento inspiró a las tribus veolianas para reconquistar sus tierras ancestrales de manos de los invasores. En la actualidad, el gran templo de Jaqoh de Nirfaganti es uno de los santuarios más grandes dedicados a la diosa que hay en Mundo.

Relaciones con otros dioses

Mantiene una relación cercana con su padre Leit, quien respeta el camino que ella ha tomado lejos de la no intervención de su padre. Aprecia a Sarra y Vryllia, pues ambas diosas reciben con alegría sus visitas, pero siente un poco de rechazo hacia Eldor por su autoritaria actitud a pesar de que Jaqoh viaja libremente por el aire. Le desagrada Trako, pero no por su maldad, sino por la misma razón que es reservada con Eldor, le disgusta que el diosa del fuego desee dominar las cosas. Es de las pocas diosas que carece de verdaderos enemigos, pues procura mantenerse afable con todos ellos ya que en su papel de mensajera lo cumple sin distinguir a nadie.

Quizá la más curiosa relación que tiene es con Ruballa, la diosa de la muerte siempre se encuentra deseosa de las visitas de Jaqoh que le traer noticias del mundo de los vivos y, por ello, tiene paso franco en su reino siempre que la diosa del viento lo desee.

Clero y rituales

Los sacerdotes y campeones de Jaqoh suelen ser vibrantes como la diosa e inspiradores hacia los demás, no precisan de grandes posesiones pues continuamente se encuentran de viaje. No existen muchos templos dedicados a Jaqoh y, ni mucho menos, una jerarquía clara. Incluso la Cumbre de los Vientos, su gran templo de Nirfaganti, es la cima de una colina con esas estructuras sin techo.

No existe un ritual único, pero la mayoría de sacerdotes concuerdan que prepararse para un nuevo viaje ya es un ritual que honra a su diosa.

Nombres en otra lenguas

• Eyneo y lénico: Hy'limen (Aura Invisible)
• Yag: Naheeris (Susurro de Árboles)
• Norteño: Lurenil (Susurro del Valle)
• Merón: Donavia (Fuerza Invisible)
• Kesa: Gan'diren (Golpe Vacío)
• Leakhán: Mazhill (Heraldo de Guerra)
• Contia: Kazeyoi (Hija del Mar)