Zant (casa)

Títulos:	Duques del Ducado Oriental, Señores del Yunque
Blasón:	Escudo cuadrilongo en punta, en campo de diamante un yunque de argén. Al timbre: corona de duque.
Lema:	Temple de acero.
Familia:	Massos
Origen:	Eyneo
Fundación:	4016 SE
Fundador:	Duncan de Axils
Señor:	Donagh Massos
Asentamiento:	Zant (destruido), Nyzam (actualmente)
Vasallos de:	Casa Sachais de Aldor (anteriormente)

La Casa de Zant ha sido siempre una de las tres Grandes Casas Ducales de Aldor, junto con la de Valdam y Litiak. Se les conoce popularmente como los Señores del Yunque, por el estandarte que lucen sus pendones.

Historia

Este ducado fue instaurado por el propio rey Aldor el Fundador en el año 1 dA, hereditario y con gobierno de la provincia oriental del reino, para su capitán Duncan de Axils. El origen de la familia se remonta por tanto a la casa noble de Massos, en la provincia eynea de Ftas.

Tercera Edad

Durante la Tercera Edad la sede de la Casa era la fortaleza de Zant, situada en una colina al sur de la ciudad minera. El ducado incluía además la aldea de Fiset y sus campos, la torre de Basok, los bosques de Fregg, la vecindad de Cheng y sus arrozales, y las minas de Londaer en su zona aldoriana.

EL ducado oriental fue el primero en caer durante la Gran Guerra, y su capital fue completamente arrasada. La Casa de Zant subsistió a duras penas huyendo durante siglos, siempre hacia el oeste, hasta quedar refugiados tras los muros de Nueva Angor al acabar la guerra.

Cuarta Edad

Regencia de Nueva Angor

Los duques de Zant siempre aspiraron en regresar a sus territorios ancestrales, mantuvieron una sólida relación de amistad con los enanos grises de Nueva Angor. Nunca se mostraron excesivamente interesados en disputar el poder político con las demás casas nobiliarias, pues la mirada de los duques siempre estaba fijada hacia el este. Este desentendimiento del futuro del reino fue ahondando en el carácter de la familia Massos, que asumieron que el reino de Aldor no volvería a restaurarse jamás. Gustosos se hubieran lanzado a la reconquista de tener los efectivos y apoyos suficientes, pero la amenaza del imperio leakhán seguía siendo muy real en ese período.

Regreso al este

La oportunidad llegó en la segunda mitad del Siglo VI CE, pues después de la Retribución de la Luz los yag expulsaron a los leakhán de los valles del Lames. Al principio los duques de Zant enviaron exploradores a sus antiguos territorios para comprobar que estaban libres de presencia enemiga, y, finalmente, en el año 685 CE el duque Banulf Massos organizó a todos sus leales y, tras reunir los recursos necesarios, se dirigieron al este abandonando Nueva Angor.

Fue un viaje largo y peligroso, pero apoyados por una expedición de enanos sirdarios, que también habían decidido unirse a sus hermanos en Hakhîmdaru, la travesía fue un éxito. Banulf Massos decidió establecer un nuevo asentamiento en lugar de tratar de tomar la antigua ciudad, pues según las leyendas aquel suelo quedó maldito durante la Gran Guerra y no quería tener que enfrentarse a la superstición de sus hombres. Eligió una ubicación mucho más defendible que la antigua capital del ducado, cerca de las Puertas de la Mañana sirdarias, lo que garantizaba un contacto regular con los enanos, y bautizó el nuevo enclave con el nombre de Nyzam.

Un año después el Gran Maremoto provocó oleadas de refugiados por todas las tierras aldorianas, y muchos de ellos acabaron por llegar a Nyzam que creció mucho más de lo previsto inicialmente. Banulf Massos declaró orgulloso, en ese momento, que el Ducado Oriental había renacido.

Expansión y asentamiento

Con el dominio del este aldoriano y las excelentes relaciones con los sirdarios, la Casa de Zant se fortaleció década tras década y pacificó las tierras circundantes de Nyzam. Las orillas del lago de Fiset eran fértiles y el lago ofrecía pesca en abundancia, lo que facilitó un rápido crecimiento de la población. Estando a las puertas del Paso de los Dragones fueron objetivo de numerosas incursiones udukis que lograron repeler, además, sus tropas también combatieron junto a los enanos grises en su guerra por recuperar su reino.

A principios del Siglo VIII CE, los duques de Zant estaban dispuestos a aumentar su esfera de influencia hacia el oeste, pero entonces golpeó el Invierno Sin Fin. Las malas cosechas, la enfermedad y los largos inviernos durante ochenta años frenaron las aspiraciones expansionistas de los Massos.

El nuevo ducado de Zant

En los últimos años del Invierno Sin Fin la Casa de Zant tuvo que afrontar el continuado acoso de incursiones de orcos, bandidos y demás criaturas salvajes de la frontera. Pero fue en el año 887 CE cuando una gran invasión de albarraks procedentes de la colina de Basok que puso en jaque las defensas de Nyzam. Los semiorcos vencieron fácilmente las defensas de los Zant cuando antes solo se habían chocado contra sus muros, estaban mucho mejor organizados que anteriores veces. En la batalla que se conoció como del Águila Negra, los defensores de Zant lograron prevalecer gracias al heroico genio militar del joven Donagh Massos, entonces heredero, que logró rechazar a los atacantes. La victoria permitió al ducado apuntalar sus fronteras y conseguir un largo período de paz.

Cuando el clima volvió a temperaturas más cálidas, el ya duque Donagh retomó los objetivos de sus antecesores, cien años atrás, y lanzó una ofensiva contra la orilla oriental del Lames, controlada por la Casa Slotter de Erión. En la Batalla del Vado de 901 CE el ejército Zant se enfrentó al ejército Slotter, y el conde Beornulf Slotter logró imponerse al duque Donagh por superioridad numérica. Rechazados de la orilla del Lames, la Casa de Zant no abandonó sus aspiraciones ni sus ansias de expansión por otros territorios.

Feudos y señoríos

Tercera Edad

Durante la Tercera Edad la sede de la Casa era la fortaleza de Zant, situada en una colina al sur de la ciudad minera. El ducado incluía además la aldea de Fiset y sus campos, la torre de Basok, los bosques de Fregg, la vecindad de Cheng y sus arrozales, y las minas de Londaer en su zona aldoriana.

Cuarta Edad

Aunque durante la mayor parte de la Cuarta Edad permanecieron en el exilio, en los Siglo X CE la Casa de Zant controla toda la orilla aldoriana del lago de Fiset y amplias zonas de las Valdaes orientales. Tienen como capital Nyzam y también les pertenece el pueblo Fiset, que fue refundado por orden de los duques.

Además, mantienen una pequeña guarnición en las ruinas de Zant a la que actualmente se la conoce como Vieja Zant.

Miembros ilustres

• Duncan de Axils, 1º Duque de Zant, fue un gran capitán del rey Aldor el fundador y amigo de los kessareos. Dejó la dirección de las minas de Massos en Eynea y participó en la conquista del reino de Aldor. Fue embajador ante los sirdarios y fundó la Casa de Zant, construyendo la fortaleza original.
• Hack Massos, Duque de Zant en el exilio en Nueva Angor durante la Cuarta Edad.
• Banulf Massos, dirigió a sus leales y regresó a las tierras ancestrales de la familia fundando Nyzam.

Armas familiares

• Escudo de Zant. Escudo cuadrilongo en punta, en campo de diamante un yunque de argén. Al timbre: corona de duque.

• El estandarte de la Casa es el Yunque.

Evolución del escudo de la Casa Zant

• 
•