Zant (ciudad)
Zant era la capital de la provincia oriental del Reino de Aldor durante la Tercera Edad. Establecido como asentamiento defensivo por el propio Aldor dos años antes de la fundación del reino, fue en su día una importante ciudad minera, aunque luego decayó tras la pérdida de las Minas de Londaer.
La provincia formaba el ducado de Zant, gobernada por la Casa de Zant con sede en la fortaleza que se encontraba al sur de la ciudad. El ducado de Zant se extendía al este del Lames, estrechándose entre la cordillera de Hyan y el gran lago de Fiset que lo separa de las llanuras veolianas. Siempre fue una región conflictiva, debido a las escaramuzas con grupos de orcos que realizaban incursiones desde el Paso de los Dragones.
Los habitantes de Zant eran los aldorianos que más trato tuvieron con los enanos sirdarios, y a menudo lucharon juntos contra las invasiones del norte. La constante presencia militar y los ataques orcos los convirtieron en un pueblo hosco y fiero, en comparación con la gente más refinada de la costa.
La Gran Guerra
Durante la Gran Guerra que marcó el inicio de la cuarta edad, la ciudad de Zant fue asediada, conquistada, reconquistada, arrasada y finalmente completamente destruida.
Bajo el mando del comandante del ejercito oriental, la ciudad resistió durante un tiempo el asedio por parte de los orcos de Udukán, pero las fuerzas aldorianas se vieron superadas cuando a los numerosos orcos se unieron varios Daalm. Las batallas se sucedieron durante semanas mientras el ejercito orco trataba de seguir avanzando hacia Bassara, donde fueron derrotados y expulsados de nuevo más allá de Zant.
Durante el segundo ataque una poderosa magia proveniente de la Corona del Conquistador levantó a los caídos en la batalla, tanto orcos como humanos. Los muertos vivientes, junto con los supervivientes del ejercito orco, volvieron a tomar posesión de Zant sin apenas dificultades.
La invasión de Bassara parecía inminente, pero algo la interrumpió. El único informe al respecto fue presentado por un batidor del ejercito aldoriano. La zona de Zant se convirtió durante unas horas en un infierno cuando una gran parte de los muertos vivientes se rebelaron y lucharon contra los suyos y los orcos. El rastro más significativo de la batalla fue un gran circulo de cadáveres desgarrados en medio del campo de batalla. Según los últimos apuntes en vida del Archimago Markus de Bassara, ese día sintió una sacudida mágica con restos de nigromancia proveniente del valle de Uduk.
Semanas más tarde, cuando se reanudó la marcha orca hacia Bassara después de que los orcos recibiesen refuerzos desde su asalto al bosque de Palindro, la ciudad de Zant fue aniquilada con cientos de orcos dentro por un ataque mágico desde la torre del Archimago Markus. El ritual fue llevado a cabo por el Archimago Valraen Glenn y su hijo, Derek Glenn, con la colaboración de algunos miembros de la Orden Arcana.
Actualmente
El duque de Zant y sus gentes han regresado a las fortalezas orientales junto a las Colinas Sirdarias, donde intentan reabrir las minas y reconstruir la antigua ciudad en ruinas. Su asentamiento actual, Nyzam, está al este de la antigua Zant, donde el camino del Este se bifurca hacia el norte a las Minas de Londaer.