Neh'kor
El demonio Neh'kor, el Amo del Tormento, era un poderoso espíritu de fuego al servicio de Trako. Dirigió las huestes de Udukán contra la ciudad aldoriana de Bassara durante la Gran Guerra y asesinó al Archimago Markus el Sabio.
Historia
Se desconoce cuando Neh'kor tomó forma física en Mundo, pero los cronistas hacen referencia al demonio a finales de la Guerra del Corrompedor, en el año 1369 dA, donde se le describe hostigando a las tropas aldorianas durante el asedio de Tulmacén. No se sabría mucho más de Neh'kor hasta la Gran Guerra donde volvería a atormentar a los ejércitos de Aldor y sus aliados siendo la conquista de Bassara su mayor éxito.
Durante el asedio de la capital de las Valdaes, Neh'kor dirigió orcos y demonios menores contra los defensores. A pesar de la heroica defensa, la ciudad cayó y Neh'kor dio muerte al Archimago Markus el Sabio en el punto álgido de la batalla. Verial Vinx, capitán del ejército aldoriano, se enfrentó en duelo singular al demonio para dar tiempo a sus hombres para la retirada, aunque el capitán murió en las manos del Amo del Tormento logró el precioso tiempo para evacuar la ciudad ya perdida. Su destrucción fue tan grande que desde ese momento sería conocido también como el Amo del Tormento.
Neh'kor se le encomendó la vigilancia de Bassara, por lo que no participó en la definitiva Batalla de Nueva Angor, donde el señor oscuro Ma'kaan fue destruido por el heraldo Renné Le Chateau. Cuando sintió el Advenimiento de la Niebla arrebatarle la mayoría de poderes mágicos, el demonio se refugió en las ruinas del palacio ducal de Bassara y horadó las profundidades de la tierra mientras la ciudad era rebautizada como Kota Besar Dewa y convertida en la capital del nuevo imperio leakhán.
No se sabe mucho más del Amo del Tormento, solo que guardaba las cámaras inferiores del Palacio Negro y era adorado por los leakhán. Cuando estos fueron expulsados de Bassara por los yag durante la Retribución de la Luz, no se descubrió cual había sido el destino de Neh'kor ya que no participó en la batalla. Los elfos colapsaron los túneles inferiores separando la superficie de las malditas cámaras inferiores donde moraba el desaparecido demonio.